Para el viajero hay mucho que ver, que conocer, que degustar. Siendo ésta una isla, evidentemente hay una gran proporción de carmelitas que se dedican a la pesca, así que sugerimos comenzar por un recorrido a pie por el mercado municipal, que está pleno de variedad, de aromas deliciosos, como el del pescado asado que se prepara y se vende recién entregado. También en la calle se ofrecen en puestos ambulantes, tipo tianguis, una gran cantidad de vegetales, las calabacitas típicas del sureste, naranjas, pepinos, elotes... sin faltar las velas de cera de Campeche, todo esto alegremente ofrecido al público por los vendedores dispersos bajo un alarde de sombrillas multicolores. Hacia el oeste, por el malecón, se ve el faro, por cierto muy querido por los carmelitas, rodeado, si tenemos suerte, de algunas plataformas que se han acercado a tierra, tal vez para su reparación.
Hacia el centro, se encuentra el Palacio Municipal y el muy hermoso Parque Zaragoza, con su reja suntuosa y su quiosco coronado de cobre. Por cierto, hay muchas ardillas, que se acercarán zalameras si se les ofrece algún cacahuate. Al pasear se pueden comprar algunas artesanías, tales como hamacas de vivos colores, algunas piezas de cerámica, juguetes, entre otros. Irremediablemente el camino los llevará a la sobria iglesia de Nuestra Señora del Carmen, patrona de la ciudad, donde vale la pena admirar sus vitrales. Otro lugar que no debe faltar en el recorrido es el parque y la Iglesia de Jesús. Su belleza sencilla es singular y encantadora, así como las calles del mismo barrio, llenas de casas antiguas, algunas de las cuales ostentan aún sus tejas europeas originales. En el extremo sureste de la isla se encuentra la Iglesia de la Asunción, en el barrio denominado El Guanal, el más antiguo de la ciudad. Esta cualidad también se puede apreciar en las casas que encontramos en esta zona. Una visita obligada es el Monumento a la Bandera, con una altura de 26 metros y con una escalera interior para subir y admirar el paisaje.
No olvide el Museo de la Ciudad, alojado en un magnífico edificio de la época porfiriana con amplios corredores con columnas y arcos y un gran patio central, donde un viejo laurel de la India parece querer contarnos la historia que sus añosas ramas han visto pasar por aquí.
Los sitios que se destacan por su modernidad son la Unidad Deportiva y la Universidad Autónoma del Carmen, y por supuesto, todos los edificios, barcos, instalaciones, en fin, todo lo relacionado con el petróleo.
Son, sin embargo, los puentes que unen la isla con tierra firme los que se llevan la admiración de quien los cruza por primera vez, alarde de ingeniería: en el norte, puente La Unidad; en la parte sur, Solidaridad, el más largo del país y que nos lleva a la isla desde Tabasco.
Para los amantes de la naturaleza...
1.- Laguna de Términos y sus imponentes bosques de manglar, con toda la riqueza natural que encierran estos sitios: aves marinas, reptiles, insectos, mamíferos y un sinnúmero de crustáceos.
Para observarlos se puede alquilar una lancha. Es un importante nicho de biodiversidad y actualmente está protegido por leyes conservacionistas, ya que es refugio natural para los delfines, para las crías de camarón y de muchas otras especies marinas de esta zona del Golfo de México.
2.- Jardín Botánico y el cocodrilario. Ambos se encuentran situados en la parte este de la isla, adelante del aeropuerto. El criadero de los reptiles, fundado para rescatar estos animales de la extinción, es un gran parque con varios estanques artificiales, cercados por malla de alambre y donde viven y se reproducen sin ser molestados. Si es aficionado a la fotografía, se pueden lograr tomas excelentes.
Cuenta con un área dedicada a los recién nacidos que se puede visitar. Incluso hasta los niños pueden tocar a las crías, bajo la supervisión de los biólogos encargados. Es importante llevar repelente de insectos.
3.- Zoológico con agradables áreas verdes y paseos en caballo, pero para llegar hay que trasladarse hacia el noroeste, a Playa Norte. Ésta, por cierto, de arena blanca y fina, hermosísima, extensa y muchas veces desierta. Muy cerca está el Campo de Golf.
Gastronomía
Lo obligado son los mariscos. Mundialmente famosos son los camarones y sus compañeros pulpos, jaibas, almejas, y variedad de pescados, que se pueden adquirir congelados en el Mercado de Mariscos, o, mejor aún, sentarse a saborearlos en los magníficos restaurantes de la isla, donde los preparan según la manera carmelita, es decir: “para hacerse agua la boca”.
5 Indispensables
• Viajar en lancha por la Laguna de Términos.
• Tomar fotos en el mercado.
• Hacer un picnic en Playa Norte.
• Probar el tradicional cóctel “campechano”.
• Comprar cera de Campeche presentada en mil formas.
Un poco de historia
La historia de Ciudad del Carmen está escrita con agua, es una isla de forma alargada, situada entre la Laguna de Términos y el Golfo de México. Originalmente constituida por varios islotes de material calcáreo, terminó siendo como la conocemos debido al acarreo de las tierras aluviales depositadas por los ríos Champotón, San Pedro, Palizada, Chumpán, Mamantel y Sabancuy. Su clima tropical y la consecuente abundancia de lluvias, le proporcionan exuberante vegetación durante todo el año.
Lo anterior nos hace dar por hecho su gran riqueza natural, y a los mayas–chontales, allá por el 600 d.C. también les pareció un buen territorio. De su paso dejaron huellas en los sitios de Zabibkac, los Cocoyoles, Ensenada y Punta San Julián, donde aún se pueden ver antiguos basamentos de sus construcciones en los que utilizaron muchos materiales derivados de conchas, ya que hasta hoy día existen en la Isla del Carmen en gran abundancia.
Los pobladores más representativos de la Isla del Carmen fueron, durante casi siglo y medio, piratas ingleses y filibusteros, aventureros sin escrúpulos que se encontraron aquí un verdadero tesoro: el lucrativo negocio de la explotación del palo de tinte, llamado ek por los mayas, es un árbol de tronco grueso sin corteza, que tarda en desarrollarse de 20 a 25 años, de madera densa, dura y de un color negro o morado negruzco en su parte exterior y rojo en el interior.
Sus hermosas y extensas playas de fina arena blanca están habitadas por cormoranes, pelícanos, gaviotas y muchas otras aves marinas. En la Laguna de Términos, mágica, opalina, rodeada de misteriosa selva de manglar, salpicada de rojos cangrejos, se refugian los delfines. Usted puede estar ahí... percibiendo un lejano aroma salino
Hacia el centro, se encuentra el Palacio Municipal y el muy hermoso Parque Zaragoza, con su reja suntuosa y su quiosco coronado de cobre. Por cierto, hay muchas ardillas, que se acercarán zalameras si se les ofrece algún cacahuate. Al pasear se pueden comprar algunas artesanías, tales como hamacas de vivos colores, algunas piezas de cerámica, juguetes, entre otros. Irremediablemente el camino los llevará a la sobria iglesia de Nuestra Señora del Carmen, patrona de la ciudad, donde vale la pena admirar sus vitrales. Otro lugar que no debe faltar en el recorrido es el parque y la Iglesia de Jesús. Su belleza sencilla es singular y encantadora, así como las calles del mismo barrio, llenas de casas antiguas, algunas de las cuales ostentan aún sus tejas europeas originales. En el extremo sureste de la isla se encuentra la Iglesia de la Asunción, en el barrio denominado El Guanal, el más antiguo de la ciudad. Esta cualidad también se puede apreciar en las casas que encontramos en esta zona. Una visita obligada es el Monumento a la Bandera, con una altura de 26 metros y con una escalera interior para subir y admirar el paisaje.
No olvide el Museo de la Ciudad, alojado en un magnífico edificio de la época porfiriana con amplios corredores con columnas y arcos y un gran patio central, donde un viejo laurel de la India parece querer contarnos la historia que sus añosas ramas han visto pasar por aquí.
Los sitios que se destacan por su modernidad son la Unidad Deportiva y la Universidad Autónoma del Carmen, y por supuesto, todos los edificios, barcos, instalaciones, en fin, todo lo relacionado con el petróleo.
Son, sin embargo, los puentes que unen la isla con tierra firme los que se llevan la admiración de quien los cruza por primera vez, alarde de ingeniería: en el norte, puente La Unidad; en la parte sur, Solidaridad, el más largo del país y que nos lleva a la isla desde Tabasco.
Para los amantes de la naturaleza...
1.- Laguna de Términos y sus imponentes bosques de manglar, con toda la riqueza natural que encierran estos sitios: aves marinas, reptiles, insectos, mamíferos y un sinnúmero de crustáceos.
Para observarlos se puede alquilar una lancha. Es un importante nicho de biodiversidad y actualmente está protegido por leyes conservacionistas, ya que es refugio natural para los delfines, para las crías de camarón y de muchas otras especies marinas de esta zona del Golfo de México.
2.- Jardín Botánico y el cocodrilario. Ambos se encuentran situados en la parte este de la isla, adelante del aeropuerto. El criadero de los reptiles, fundado para rescatar estos animales de la extinción, es un gran parque con varios estanques artificiales, cercados por malla de alambre y donde viven y se reproducen sin ser molestados. Si es aficionado a la fotografía, se pueden lograr tomas excelentes.
Cuenta con un área dedicada a los recién nacidos que se puede visitar. Incluso hasta los niños pueden tocar a las crías, bajo la supervisión de los biólogos encargados. Es importante llevar repelente de insectos.
3.- Zoológico con agradables áreas verdes y paseos en caballo, pero para llegar hay que trasladarse hacia el noroeste, a Playa Norte. Ésta, por cierto, de arena blanca y fina, hermosísima, extensa y muchas veces desierta. Muy cerca está el Campo de Golf.
Gastronomía
Lo obligado son los mariscos. Mundialmente famosos son los camarones y sus compañeros pulpos, jaibas, almejas, y variedad de pescados, que se pueden adquirir congelados en el Mercado de Mariscos, o, mejor aún, sentarse a saborearlos en los magníficos restaurantes de la isla, donde los preparan según la manera carmelita, es decir: “para hacerse agua la boca”.
5 Indispensables
• Viajar en lancha por la Laguna de Términos.
• Tomar fotos en el mercado.
• Hacer un picnic en Playa Norte.
• Probar el tradicional cóctel “campechano”.
• Comprar cera de Campeche presentada en mil formas.
Un poco de historia
La historia de Ciudad del Carmen está escrita con agua, es una isla de forma alargada, situada entre la Laguna de Términos y el Golfo de México. Originalmente constituida por varios islotes de material calcáreo, terminó siendo como la conocemos debido al acarreo de las tierras aluviales depositadas por los ríos Champotón, San Pedro, Palizada, Chumpán, Mamantel y Sabancuy. Su clima tropical y la consecuente abundancia de lluvias, le proporcionan exuberante vegetación durante todo el año.
Lo anterior nos hace dar por hecho su gran riqueza natural, y a los mayas–chontales, allá por el 600 d.C. también les pareció un buen territorio. De su paso dejaron huellas en los sitios de Zabibkac, los Cocoyoles, Ensenada y Punta San Julián, donde aún se pueden ver antiguos basamentos de sus construcciones en los que utilizaron muchos materiales derivados de conchas, ya que hasta hoy día existen en la Isla del Carmen en gran abundancia.
Los pobladores más representativos de la Isla del Carmen fueron, durante casi siglo y medio, piratas ingleses y filibusteros, aventureros sin escrúpulos que se encontraron aquí un verdadero tesoro: el lucrativo negocio de la explotación del palo de tinte, llamado ek por los mayas, es un árbol de tronco grueso sin corteza, que tarda en desarrollarse de 20 a 25 años, de madera densa, dura y de un color negro o morado negruzco en su parte exterior y rojo en el interior.
Sus hermosas y extensas playas de fina arena blanca están habitadas por cormoranes, pelícanos, gaviotas y muchas otras aves marinas. En la Laguna de Términos, mágica, opalina, rodeada de misteriosa selva de manglar, salpicada de rojos cangrejos, se refugian los delfines. Usted puede estar ahí... percibiendo un lejano aroma salino
Era codiciado por su aplicación en la coloración textil en Europa y Estados Unidos, tanto que los piratas llegaron a exportar 100,000 quintales de palo de tinte solamente a Inglaterra. Lamentablemente, y como sigue sucediendo cuando se explota irracionalmente un recurso, para mediados del siglo XIX habían desaparecido de la zona. Expulsados los piratas, los españoles tomaron posesión de la isla en 1717, el día de la Virgen del Carmen: 16 de julio.
Cómo llegar
Se puede llegar por la carretera federal núm. 180; por mar, a través del puerto de Laguna Azul, o por las rutas aéreas.
Por ser una isla, las posibilidades de diversión y contacto con la naturaleza son ilimitadas.
Playa Norte es un paraíso de blanca y fina arena, hermosísima, extensa y muchas veces desierta.
Cómo llegar
Se puede llegar por la carretera federal núm. 180; por mar, a través del puerto de Laguna Azul, o por las rutas aéreas.
Por ser una isla, las posibilidades de diversión y contacto con la naturaleza son ilimitadas.
Playa Norte es un paraíso de blanca y fina arena, hermosísima, extensa y muchas veces desierta.
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